La emergencia por contaminación de fuentes de agua con mercurio acelera la posibilidad de que, al fin, las comunidades fronterizas tengan su propio acueducto.
El director regional del AyA informó que está en análisis la ampliación del acueducto de Santa Rosa hasta Crucitas por medio de un ramal.
Esta sería la solución permanente al eterno problema de comunidades fronterizas y el acceso a agua potable.
Y es que para poder abastecer a estos poblados deben tomar agua de fuentes que no estén contaminadas por lo que lo más seguro es llevarla desde Santa Rosa.
"Es una solución a largo plazo que es extender el ramal de El Concho a Crucitas, es un proyecto que tiene su costo económico que hay que hacerlo, diseñarlo y que va a tomar su tiempo pero en este momento en lo que estamos actuando es en atender la emergencia", dijo Héctor Paniagua, director regional del AyA.
Esta propuesta contempla la extensión del acueducto de Santa Rosa de Pocosol – sector El Concho – en el punto Ramal Batalla, y que, por las condiciones topográficas del lugar, se deberá considerar la instalación de un tanque elevado, un equipo de bombeo, 22 km de conducción y las correspondientes redes de distribución.
Se tratará de incluir a esta propuesta el resto de las comunidades cercanas afectadas y que se puedan interconectar, esperando con esta solución atender toda la zona.
Esta solución se encontraría en las primeras etapas de desarrollo de su prefactibilidad y no será hasta que se avance con las viabilidades que se pueda determinar la duración y costo.
