Durante la campaña política, la comunicación verbal y la no verbal son de trascendental importancia para transmitir un mensaje idealmente persuasivo y efectivo. El cuerpo, en sus diferentes posturas, movimientos de manos y expresiones faciales, habla permanentemente. La elección de nuestras palabras y el tono en que las decimos tienen el poder de edificar, dividir y de ilusionar. Los eslóganes y spots publicitarios que los políticos utilizan buscan motivar al votante. En ese sentido, en el artículo anterior Manos limpias, boca incendiaria se comentó el desenvolvimiento del candidato Fabricio Alvarado. Hoy, a la luz de diferentes frases, declaraciones y comportamientos del candidato Carlos Alvarado, del Partido Acción Ciudadana, se expondrán algunas observaciones al respecto.
Distinguiendo senderos
Similar a la variación de eslóganes que se dio en varios partidos, como -por ejemplo- en el PUSC con Póngale la firma, ¿Quién dijo que no se puede? y Vote por algo, desde la precampaña de Carlos Alvarado, hasta el presente, en su equipo de trabajo han ido ‘probando alcance’ entre los electores con lemas tales como Elijo el futuro y Yo creo. El caso de Elijo el futuro fue un eslogan de espíritu joven, pero no pareció ser del todo original, pues la frase Elijo mi futuro es utilizada por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Otro ejemplo, lo encontramos en una campaña española de 2013, en la que se llamó a combatir el desempleo juvenil (fundación montemadrid.es). El Yo creo fue una frase austera y positiva, pero se pudo percibir fuera de lugar, pues parecía un título para ser cantado por Fabricio Alvarado. En todo caso estas frases han sumado para llegar al punto que ha alcanzado.
Luego de los resultados reflejados en primera ronda, con dosis de avidez y cierto cuidado, optan por cambios y presentan: Es por vos, es por Costa Rica (Facebook del candidato, 20 de enero 2018). El eslogan no es precisamente impactante o pegajoso. Sin embargo, con la intención de lograr la meta, se apela a los intereses de cada individuo y del país como un todo. El peso del lema se inclina hacia un llamado de fervor nacional. En la acera de Restauración no se quedaron atrás, pero sin mayor sorpresa contraatacan con la frase: Porque unidos somos Costa Rica. (elmundo.cr, 8 de marzo de 2018).
¿Rebuscando lo conocido?
El spot publicitario Es por vos, es por Costa Rica comenzó a ser difundido recientemente. En este, el aspirante está presente mediante el sentido del oído, ya que solo escuchamos su voz. Esto probablemente se decidió para proporcionarle mayor protagonismo a los paisajes y a las personas que se presentan. En un esfuerzo por motivar, el candidato nos dice: “Hemos recorrido cada rincón de este país y hemos visto las miradas de las personas… las miradas de las personas que quieren defender la democracia con mayor historia en el continente…” (Video en la página de Carlos Alvarado, 27 de febrero 2018). Su voz inicia de manera armónica para luego derivar un tono más entusiasta. En la palabra ‘historia’ él realiza un énfasis especial apelando al orgullo democrático costarricense.
Se reproducen tomas aéreas de bosques, mar y playa, potreros, rostros de estudiantes, campesinos, de una madre amamantando a su bebé y de niños jugando, entre otros. Sin embargo, en uno de los spots del excandidato Figueres Olsen Grande Costa Rica (Facebook del excandidato, 16 de enero 2017) recordaremos considerables similitudes con el nuevo spot de Carlos. El eslogan aparece al inicio y al final, se escucha una voz que crece en emoción y que apela a la grandeza y al orgullo de los ticos, también se muestran imágenes de verdes paisajes y de gente optimista. Es como si al ‘sello’ Figueres que ya conocimos, alguien del equipo de Carlos le hubiera hecho copy-paste.
Volador con brújula en mano
En el debate organizado el 14 de enero por la Iglesia Católica, a los candidatos presentes se les preguntó cuál sería la posición de su gobierno en relación con la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Iniciando con un tono pausado, de manera metódica y con un aire de moderación, Carlos Alvarado responde: “Yo como candidato estoy a favor del matrimonio igualitario civil. Comparto el fallo de la corte porque es consecuente con lo que yo he dicho y lo que yo he dicho es…yo soy casado, me casó el padre Alejandro, asesor del arzobispo, hace 7 años… estoy casado por la iglesia, pero entiendo, desde mi concepción, una división entre lo que es el sacramento del matrimonio como sacramento religioso entre hombre y mujer, y un tema civil de igualdad frente al estado.” (Radio Pilarcita, inicio de la intervención 2 horas con 37 minutos).
Inicialmente se percibe una intención de no saturar de emoción el discurso, contrastando con la intervención acalorada y retadora que su contrincante demostró unos minutos antes. Ante la opción de exponer una posición definida sobre el pronunciamiento de la Corte, el uso de pausas le permitió a Carlos captar atención, a la vez que fue buscando ritmo para entrar en comodidad y dar sentido de rumbo al discurso. En sus expresiones faciales se registra un matiz de reflexión y predomina una emoción neutra, lo cual es uno de los estados más difíciles de sostener para un político, y que -en buena teoría- existen situaciones en las cuales es necesario demostrarla.
Por breves instantes, el candidato pasa el micrófono de una mano hacia la otra aportándole soltura. El aire es acariciado. Igualmente, la mayor parte del tiempo mantiene la palma de sus manos liberadas y expuestas, haciendo movimientos suaves, lo cual en comunicación no verbal se asocia a una actitud sincera. Finalmente, haber compartido un testimonio personal le pudo haber generado acercamiento con los votantes.
¡Pase adelante Don Rodolfo!
En su intento por obtener el respaldo de una figura política como lo es Rodolfo Piza, Carlos y su equipo negociador mantuvieron comunicación por varias semanas hasta alcanzar un acuerdo. El candidato no podía darse el lujo de perder un respaldo de este calibre y en ese sentido se fue tras la captura hasta lograr el objetivo. La propuesta escrita provino del Social Cristiano y es un documento de siete páginas donde se exponen diez temas prioritarios para alcanzar ‘La gobernabilidad, la equidad y el desarrollo’ (el mundo.cr, jueves 8 de marzo 2018).
En la acera de Restauración probablemente hubiesen deseado que Piza se mantuviera ‘neutro,’ o que no le diera su adhesión a Carlos Alvarado. Pero, para consolación de Fabricio Alvarado, casi mientras se daba el encuentro Piza-Carlos, pues solo hubo una hora de diferencia entre un evento y el otro, una cantidad de figuras socialcristianas lo aplaudían, otros lo ovacionaban y ondeaban las banderas rojiazules. Tal vez los anticuerpos entre el gobierno PAC y la Unidad no daban para más, dejando que a Piza se le apreciara un tanto solitario en la conferencia. Puede que al final, el mensaje que Rodolfo Piza haya enviado, al tener a Carlos a su lado, sea que es mejor estar con alguien por convicción, que estar con otro por necesidad.
Una de las fotografías muestra una imagen para el recuerdo, Piza sostiene el documento y es quien visualmente queda con peso, evidenciando una posible señal de que su propuesta es ganadora. Con una vestimenta de camisa clara, saco oscuro y ambos sin corbata, Carlos y Rodolfo armonizan tanto en forma como en fondo. Inclusive en Carlos hay interés por crear sintonía, pues sutilmente imita algunas de las posturas que Piza mantiene en la mesa de la conferencia. Esto es un recurso en comunicación que se utiliza para crear empatía y comodidad. Por medio de su lenguaje no verbal, el aspirante rojiamarillo le comunicó: siéntase en casa.
¿Santo o demonio?
Carlos Alvarado, como candidato, muestra tacto en su forma de hablar y en la manera de conducirse corporalmente, aunque en su desempeño podría dar mucho más. En algunos de sus eslóganes no vimos mayor creatividad y en el spot mencionado se apoyan en fórmulas conocidas. Para la batalla que le espera necesitará refuerzos si se ambiciona el objetivo. Aun así, él parece ser un agudo reconocedor de oportunidades de crecimiento.
Entre quienes le critican, se le invalida sugiriendo que representaría un antivalor, como dijo en algún momento por el programa radial Voz de Restauración el predicador Luis Fuentes: “… para el primero de abril de este año Costa Rica va a estar eligiendo a un nuevo gobernante, un nuevo presidente, y el pueblo tiene que decidir si quieren a Dios o quieren al Diablo.” (Voz de Restauración Facebook Live, 16 de febrero 2018), haciendo alusión a que Dios estaría del lado de Fabricio y no de Carlos. Después de todo, una visión maniquea de ‘luz o tinieblas’, de ‘bueno o malo’ podría no ser realista con nuestra condición humana de imperfección y eventualmente, lo que una vez dijo San Agustín nos dirija a verle desde una posición menos arbitraria: “El hombre es un ser medio entre las bestias y los ángeles.”
Sobre el autor del artículo:
Marlon Segura, director escénico, analista y coach no verbal- Universidad de Costa Rica - Kansas, Ecole Jacques Lecoq, París.
Edición: Damaris Madrigal, Universidad de Costa Rica.
Asesor en el área de la voz: Gabriel Morera, Universidad de Costa Rica.
Asistencia en la edición: Francisco Chavarría y Daniel Calderón, Universidad de Costa Rica
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