Recién circularon fotos que demuestran que el querido Liceo San Carlos, casa educativa de decenas de generaciones del cantón, se cae a pedazos.
Y no es para menos. Desde hace 15 años no recibe inversión en infraestructura por parte del Ministerio de Educación Pública.
Esto, nos lo confirmaron por medio del departamento de prensa de la cartera tras una solicitud de este medio.
«Al Liceo de San Carlos se le asignaron 96 millones en el 2010», confirma la respuesta que enviaron desde la Dirección de Infraestructura Educativa.
Y pese a esto, lo más grave es que en este momento, pese a constantes solicitudes por parte de la Junta de Educación, no hay proyectos de inversión activos por parte de la DIE.
Contradicciones
Pese a que el MEP señala que la última asignación de fondos fue en 2010, la actual Junta de Educación refiere a que en 2009 les asignaron 700 millones de colones pero que no ejecutaron hasta 2017 cuando, remodelaron tres pabellones y construyeron el área para el Bachillerato Internacional, confirmó Yuseth Bolaños, secretaria del grupo.
Aun así, los problemas de infraestructura son visibles y la gravedad se centra en el tema eléctrico que ya tiene un diagnóstico para lograr nueva inversión de la DIE cuanto antes.
Ante esto y tras los recientes hechos que acabaron con la destitución de la directora anterior del centro, un grupo de padres de familia con estudiantes y egresados trabaja en mejorar la planta física para recuperar la joya educativa del cantón.
«Desde que llegó el nuevo director nosotros le expusimos cuáles eran las necesidades del colegio y él junto con los miembros de la junta hizo todo un recorrido por las instalaciones e inmediatamente se comenzó a mover y lo primero que hizo fue abrir puertas a personas que tuvieran una propuesta», comentó Teresita Jiménez, vocera del grupo de padres.
Incluso, un comerciante y exalumno donó herramientas, pintura y material para reparaciones. También recibieron cocina, aires acondicionados, ventiladores y artículos para los estudiantes con condiciones especiales.
A partir de ahí, nació el plan «Ave Fénix», para ver resurgir el centro educativo.
«Estamos trabajando para que exalumnos se organicen por generaciones para que hagan trabajo comunal, ya sea lavar los muros, lavar techos, hacer chapias, limpieza de escombros, pintura, arreglar los baños para que no haya necesidad de invertir en mano de obra». añadió Jiménez.
Con la pintura que ya hay inician trabajos en la plaza del colegio y la parte del gimnasio. Los estudiantes de Bachillerato Internacional trabajan en lavar el colegio y los estudiantes del Plan Nacional, van a trabajar en mejoras.
«En los últimos 4 años, por lo menos, fue la decadencia del colegio en términos de infraestructura, limpieza, aseo y demás», añadió la madre de familia.
Mejoras en cuestión de semanas
En cuestión de semanas, luego del cambio de administración en el Liceo San Carlos, ya hay mejoras visibles para tranquilidad y seguridad de los estudiantes.
Ya chapearon los alrededores de la plaza del colegio que se convertían en sitio para fechorías. Ahí también limpiaron escombros y la zona está lista para pintura.
Ahora, el llamado es a comerciantes que quieran sumarse a las donaciones para entre todos, rescatar este emblema sancarleño.
El Liceo San Carlos recibe 1.200 estudiantes de educación regular, Plan Nacional, Bachillerato Internacional y el CINDEA.
Empezó a funcionar en 1945, en un edificio particular con el nombre de escuela complementaria; diez años después se estableció como Liceo, en la primera administración de don José Figueres Ferrer.
Con motivo de la celebración del 70 aniversario del Liceo San Carlos, el centro educativo conmemoró su fundación el pasado 7 de marzo, con un homenaje a la señora Ana Celia Zentella, miembro del Cuerpo de Paz.
Ella llegó al centro educativo con 24 años, y aportó grandes cambios para el colegio. Enseñó el idioma inglés a los estudiantes, fomentó el empoderamiento femenino para que pudieran realizar tareas destinadas a los hombres e impulsó a las alumnas en deportes como el baloncesto, voleibol y natación.