Para muchos, hace años, era el lugar favorito para ir a comprar los útiles escolares o los regalos de Navidad.
Sus pasillos lucían las últimas tendencias en cuadernos y juguetes cada temporada. Al fondo, lapiceros de colores, cartulinas, papeles y una vitrina que exponía los últimos libros que llegaban.
Esa, era la librería El Estudiante que a finales de setiembre cerró su local a solo 50 metros norte de la Catedral, en el corazón de Ciudad Quesada y luego de una década tener esas puertas abiertas.
Desde el 30 de setiembre, este comercio opera en una nueva ubicación: 25 metros al norte de la delegación policial de Ciudad Quesada en barrio San Antonio.
"Hay dos valoraciones, una es que las ventas han bajado mucho en el centro y la segunda es que nos salió una opción muy buena para alquilar el local entonces todo confabuló", contó Raúl Salas, propietario del comercio.
El establecimiento anunció además que, el nuevo local ofrecerá nuevas líneas de productos disponibles.
Esto no es un adiós
Así inicia la comunicación oficial del cierre del local en Ciudad Quesada de Kleavers Restaurante, tras 37 años de estar abiertos en su icónica ubicación.
"Nuestra empresa está trabajando en nuevos proyectos, por lo que hemos decidido cerrar las puertas de nuestro restaurante, este lunes 14 de octubre", cita la información.
Este lugar, será recordado no solo por su especialidad en pollo frito si no por otros platillos y porque era el sitio abierto incluso, en horas de la madrugada.
Los propietarios informaron que mantienen abierto el local comercial que está en urbanización Coocique, también en Ciudad Quesada.