Las risas, las anécdotas y las canas llenas de experiencia regresaron a las instalaciones del Centro Diurno en Santa Rosa de Pocosol.
Tras dos años de ausencia producto de la pandemia por la Covid-19, los adultos mayores de la comunidad se reencontraron para compartir momentos de mucha alegría y aprendizaje.
Este lunes los funcionarios del centro les recibieron con globos y música para volver a brindarles acompañamiento y calidad de vida.
"Fue muy ameno, estaban muy motivados y felices de volverse a ver, de contarse historias, se compartir tiempo juntos", explicó Carolina González, coordinadora del centro.
Para mantener los cuidados necesarios contra la covid, los 44 adultos mayores que atienden se dividieron en dos grupos que visitarán el centro de semana por medio.
Con el regreso a la presencialidad los abuelitos volverán a ejercitarse, recibir terapia, charlas, taller de lectura, bailar, disfrutar de juegos de mesa y también la alimentación.
Durante los dos años de ausencia no quedaron solos, los funcionarios del centro se mantuvieron en constante comunicación con ellos y sus familias, también estuvieron entregando diarios y regalos en los días festivos, todo hasta donde las medidas sanitarias lo permitieran.
"Estuvimos llamándolos, dando seguimiento por si estaban enfermos o tenían alguna necesidad con medicamentos o alimentación y que ellos no tuvieran que salir de sus casas y en las fechas especiales como día del padre o la madre les llevamos regalos o un almuerzo", agregó González.
El Centro Diurno nació en 1993 bajo el nombre «Grano de Oro», en la actualidad se financia con aportes del estado y de la propia comunidad de la mano con la Unión Zonal y la Asociación de Desarrollo de Santa Rosa.