Cada persona es un mundo, y cada uno tiene metas diferentes, muchos quieren bajar de peso y otros por el contrario buscan aumentar de peso.
Los planes de alimentación para cumplir con los propósitos deben incluir un aumento o disminución de calorías, estos cambios muchas veces no son fáciles de sobrellevar, por lo que debe buscar maneras para hacerlo más fácil.
Según el objetivo que se está buscando, se puede engañar la mente para hacer el proceso más sencillo. Por ejemplo una persona que está en plan de pérdida de peso se le recomienda utilizar platos pequeños, al verlo lleno cree que está comiendo bastante, en cambio, sirviéndose las mismas porciones, pero utilizando un plato grande, la persona va a sentir que está comiendo poco, y esto puede provocar que al final repita porque siente que comió pocas cantidades.
Caso contrario, las personas que están en búsqueda de aumento de peso, deben consumir más alimentos de lo usual, sin embargo ellos posiblemente estén acostumbrados a porciones pequeñas, por lo que aumentar esas porciones les resulta difícil.
En este caso se recomendaría utilizar platos grandes, ya que muchos de ellos al ver el plato lleno se les va el apetito y terminan comiendo poco; si ven el plato vació aunque tenga las mismas porciones posiblemente logren comerlo todo.
Siempre recordar que la mejor guía se la dará un nutricionista para que sepa exactamente que cantidades de cada alimento debe consumir.