El cambio de gramilla del estadio Carlos Ugalde Álvarez avanza a paso lento, pero firme.
El cartel de licitación para poder adjudicar la obra estaría publicado esta misma semana, según confirmaron miembros del Comité Cantonal de Deportes (CCDRSC), ante la consulta de este medio.
"De hoy (jueves) a mañana tiene que salir el cartel, he estado en contacto con los muchachos de la administración porque si tiene que salir esta semana para que las empresas puedan ofertar", dijo Flora Ballestero, presidente del CCDRSC.
El trámite que estaba para ejecutarse meses atrás, sufrió un atraso debido a que las autoridades locales buscaron que la actual gramilla del estadio fuera parte del pago a la empresa que reciba la adjudicación del proyecto.
Sin embargo, este procedimiento requería una aprobación del Concejo Municipal de San Carlos como superior jerárquico del CCDRSC.
Ese trámite fue solventado el pasado lunes, cuando los 9 regidores aprobaron la autorización.
"En Sicop cuando nosotros incluimos la cláusula del césped como parte del pago, nos la rechazaron porque necesitábamos la aprobación del Concejo y de inmediato mandamos una nota a la alcaldía y se hicieron los trámites", añadió Ballestero
Según el avalúo realizado por un perito del ayuntamiento, el valor de la gramilla actual del Carlos Ugalde Álvarez es de 32.7 millones de colones, ese monto es el que se utilizaría para completar los 170 millones de colones que costaría la instalación de la nueva grama.
Es decir, la empresa que resulte adjudicada se llevará la actual gramilla como parte de pago.
La proyección es que una vez adjudicada la obra, la misma esté concluida a los 3 meses, es decir, podría estar finalizada entre diciembre 2024 o enero del próximo año, siempre y cuando no haya más atrasos en el proceso de adjudicación.
El 30 de julio anterior la Federación Costarricense de Fútbol autorizó a la Asociación Deportiva San Carlos a utilizar este recinto deportivo por 6 meses más, fecha que expira el próximo 31 de enero de 2025.
De no haber nueva gramilla a esa fecha, la asociación deberá buscar, de nuevo, un estadio alterno para disputar sus juegos en la primera división.
Este inmueble lo usan 33 mil personas al año, entre ellos asociaciones de fútbol femenino, amputados y todas las ligas menores.