Hace 12 días, la empresa autobusera San José-Venecia, pasó a manos de dos empresarios locales. Se trata de Adonay Campos, quien fue socio fundador de ella y Luis Hidalgo.
Campos es además dueño de CHILSACA, empresa que asiste temporalmente para completar el servicio.
Laura Campos, administradora de ambas empresas confirmó que ya trabajan en la apelación de la revocatoria de la concesión por parte de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos y además, solicitan la respectiva autorización ante el CTP, de las unidades de CHILSACA que usan para viajar a San José y que no tienen permiso.
"Estamos en un tipo de operación rescate y en nuestro caso somos muy respetuosos de los organismos que nos rigen y en este caso estamos haciendo una propuesta al CTP y a la Autoridad Reguladora y si ellos lo tiene a bien, asumiríamos el servicio más formalmente", dijo.
Explicó además que lo que hacen en este momento es tratar de mantener el servicio con la mayor calidad posible.
En noviembre anterior, ARESEP canceló la concesión a la empresa por cobros indebidos, pero hay un plazo de 3 meses para resolver apelaciones y luego de eso, el CTP tiene tres meses para licitar de nuevo, la ruta.
Mientras, la nueva administración opera la ruta con ayuda de al menos 6 unidades de CHILSACA durante los días que sea necesario, pero dichos buses aún no están autorizados por el CTP.
"Nosotros lo que hacemos es asegurar el servicio, si hay fila en la parada y nosotros tenemos unidades disponibles por qué vamos a hacer esperar a la gente una hora o más si el próximo bus viene por Zarcero. Esta es una figura normal, todas las empresas lo hacen", explicó Campos.
El departamento legal de la empresa, tramita la apelación ante ARESEP pero si dejaron claro que, si el CTP les autoriza la ruta, Autotransportes San José-Venecia tendrían instalaciones y flota ajenas a CHILSACA pero mientras, todas las operaciones de ambas empresas comparten el espacio físico.
Ahorita hay 2 buses en proceso de sustitución y en proceso de compra 6 buses nuevos, pero todo dependerá de lo que resuelvan las autoridades que los rigen
La compra fue hecha por Adonay Campos, no por Chilsaca. Ahora, ¿Cuál es el riesgo de comprar una empresa en quiebra, cuestionada y sin concesión?
"Confiamos en nuestros asesores y la recomendación que nos hicieron de hacer una propuesta pero todo está supeditado. En la negociación nos cubrimos y todo quedó supeditado a que el CTP nos autorice, si no pasa eso simplemente don Adonay devuelve la empresa a su exdueño", respondió Campos.
Sobre los cuestionamientos de "monopolio" la administradora dijo que es injusto porque cada empresa es de personas diferentes, aunque son familia, y no todas son CHILSACA.
Sobretodo este tema en el CTP indicaron que esperarán las notificaciones correspondientes para referirse y ver qué solución dan al tema.