Orina, heces, olores fétidos, daños en techos y mucho más es parte de lo que, a diario, viven vecinos del barrio más populoso de Ciudad Quesada: barrio San Martín.
Una plaga de mapaches atormenta a vecinos y hasta educadores y estudiantes de la escuela local.
La situación la viven desde el año anterior pero, con mayor intensidad en estos primeros dos meses del año. La situación ya es desesperante para todos.
Los animales invaden casas en Calle Man, Calle Manolos, en la calle aledaña a la escuela y en la propia escuela.
"Es una situación problemática a nivel institucional pero gracias a Dios, la junta, el patronato y la institución hemos tomado cartas en el asunto. La escuela, del año pasado a acá se ha fumigado 4 veces, se tiene un control muy estricto y este año, antes del ingreso a clases ya se fumigó y vamos a fumigar cada 4 meses", destacó Jaime Vinicio Miranda, director de la escuela San Martín.
El año anterior este centro educativo registró una plaga de pulgas, también a causa de la permanencia de mapaches en la parte de la infraestructura.
Solo en fumigaciones, el centro suma gastos de hasta 800 mil colones y a pesar de los recortes presupuestarios, hacen los esfuerzos para mantener la sanidad entre la población estudiantil y los docentes.
Vecinos desesperados
"Todos los días se meten en el cielo raso de la casa, se orinan y los orines bajan por las paredes del cuarto de mi hijo, no nos dejan dormir en las madrugadas, hueles apestosos y ya estamos cansados y ya no hallamos cómo cerrar para que no se nos metan".
Este es el testimonio de Karol Barrantes, vecina de Calle Man y quien teme por la salud de su hijo menor de edad pues, los animales invaden su espacio.
Muy cerca de su casa está la de Analive Solera quien también sufre por esta plaga que incluso, ya le dejó pérdidas.
"Ya se me comieron dos gallos e incluso, entraron a la cocina de la casa, abrieron la alacena y tuvimos que botar toda la comida que recién habíamos comprado", narró.
Algo parecido vive doña Clara Morera en calle Manolos, también en San Martín. Ella y su familia tuvieron que, hasta cambiar las tablillas del cielo raso de la casa.
"Una familia de 8 animalitos se hospedaron en el cielo raso, tuvimos que quitarlo y han destruido parte del cielo raso. La tablilla estaba completamente dañada, los orines son muy fétidos y lo que uno tiene entendido es que transmiten enfermedades peligrosas", contó Morera.
Otros vecinos tienen más suerte y solo ven pasar los animales pero, viven con el temor y bajo la sombra de que en cualquier momento hagan daño.
"Ellos visitan la casa pero no viven ahí, pasan en busca de comida y eso es de todos los días, calculo que pasan como 4 mapaches", relato Ana Lorena Vargas, quien vive cerca del salón comunal.
Riesgos para la salud humana
Es conocido que los mapaches son animales agresivos y además, portadores de enfermedades muy riesgosas para la salud humana.
Ahí radica gran parte de la preocupación de los vecinos afectados, además de la desesperación que causa lidiar con ellos.
Rabia, Leptospirosis y hasta bacterias son parte de los riesgos para la salud de los humanos. Por esta razón los vecinos temen que ya esté en riesgo la salud pública de la comunidad.
Soluciones
El Ministerio de Salud podría actuar ante esta situación sobre todo si en caso extremo y grave, ya haya personas afectadas.
"Es que debemos abordar el tema conjuntamente si hay afectación a las personas, pero no tengo reporte de casos que estén siendo atendidos en ebáis y hospital San Carlos", explicó Claudia Rosales, directora regional de Salud.
Por ser animales silvestres, la otra institución a cargo es el MINAE por medio del SINAC. Ellos ofrecen soluciones sin tener que atentar contra la vida de las especies.
"Nosotros lo que podemos hacer es que nos llamen, los que tienen el problema y nosotros les facilitamos una jaula, se atrapan los animales y luego los reubicamos; eso es lo que podemos hacer por que son animales silvestres, nos gusten o no o aunque sea una plaga es vida silvestre", detalló Fausto Alfaro, director regional del MINAE.
En este caso, los afectados pueden gestionar la intervención del SINAC por medio del número de teléfono 2460 5615