El fin de semana, la alegría llegó en forma de recipientes con agua a comunidades fronterizas donde, desde hace dos semanas están con sus fuentes clausuradas por contaminación con mercurio.
Incluso, al fin pudo llegar asistencia a poblados como Chorreras y El Roble donde, el suministro era casi nulo.
Se trató de un trabajo humanitario por parte de la Cruz Roja con apoyo y dirección del AyA y Ministerio de Salud.
"Este sábado 25 de febrero con apoyo de la Cruz Roja San Carlos se realizó un censo en la comunidad de Tiricias, donde se distribuyó dos recipientes por casa y se aprovechó para educar a la población sobre el uso adecuado del agua potable", indicó, por medio de un comunicado, la oficina local del AyA.
Los recipientes plásticos, especiales para el traslado de agua, los donó la Comisión Nacional de Emergencias para este fin específico y garantizar el abastecimiento del líquido.
El plan de acción inmediata tras las órdenes sanitarias del Ministerio de Salud, consiste en el abastecimiento mediante camiones cisterna en los cuales se transporta el agua potable suministrada por la ASADA de Santa Rosa de Pocosol para llenar tanques de almacenamiento de polietileno en puntos estratégicos en cada una de las comunidades de Llano Verde, Crucitas, Jocote y Chamorro, donde hay acceso para este tipo de transporte.
Donde no hay acceso, como Chorreras y El Roble, es donde llega la ayuda humanitaria con los cruzrojistas.